Guerra y paz: Donetsk y Lugansk (III). Visiones desde la “Izquierda radical”.
Por Orestes Martí y Fernando Alemán
Hemos brindado diferente información con la que tratamos de cubrir un amplio abanico de opiniones y visiones sobre la actual agudización de la crisis entre los diferentes “polos” de poder que actualmente se observan en el escenario mundial y muy especialmente en el entorno de Rusia.
No ha estado exenta esta “cobertura” de polémicas y de posibles insuficiencias, muy especialmente motivadas por la desinformación u otro tipo de manipulación de la información, incluyendo los absurdos y contradictorios comentarios y mensajes sobre una supuesta intención del Presidente ruso (V Putin) por un lado de querer restablecer el Imperio ruso y por otro de querer restituir la Unión Soviética (Putin es anticomunista declarado).
Así las cosas, hoy queremos compartir algunas visiones desde la izquierda más radical: una traducción de la “Declaración del PSL sobre la intervención militar de Rusia en Ucrania” (1). y otra del Partido Comunista de la Federación de Rusia (2). Comenzaremos con la Declaración del PSL de EE.UU.:
“La operación militar rusa en Ucrania pone de relieve que el mundo ha llegado a una peligrosa bifurcación en el camino. Es de vital importancia para las personas en los Estados Unidos, que reciben la mayor parte de su información de los medios capitalistas que funcionan como una cámara de eco para el gobierno de los EE.UU., saber que la crisis actual es el resultado de un largo esfuerzo de los Estados Unidos para establecer la dominación absoluta en toda Europa. La política estadounidense tiene como objetivo socavar la seguridad de Rusia rodeándola de misiles avanzados que pueden alcanzar sus objetivos rusos en menos de 10 minutos.
“Durante los últimos tres meses, el gobierno ruso pidió simultáneamente negociaciones sobre sus preocupaciones de seguridad y, al mismo tiempo, acumuló tropas en la frontera entre Rusia y Ucrania y en la frontera entre Ucrania y Bielorrusia. Putin anunció que Rusia intervendría militarmente en Ucrania después de que Estados Unidos y la OTAN rechazaran sus demandas fundamentales de que Ucrania no se incorpore a la OTAN y que Ucrania, que comparte una frontera de 1.200 millas con Rusia, no se utilice como escenario para misiles avanzados. que apuntan a Rusia.
“En esencia, Putin y Rusia exigían que Ucrania fuera un país neutral y nunca miembro de la OTAN. Fue precisamente a través del territorio de Ucrania que Rusia estuvo sujeta a la invasión nazi de la Segunda Guerra Mundial y las invasiones anteriores de las potencias occidentales. En la Segunda Guerra Mundial, cuando Ucrania y Rusia eran un solo país (la Unión Soviética), más de 27 millones de personas murieron resistiendo la invasión nazi de sus países de origen.
“En este momento crítico, es imperativo que el gobierno de EE.UU. cambie su postura temeraria y provocativa de rodear a Rusia y expandir implacablemente la OTAN hacia el este. Desde la disolución de la Unión Soviética en 1991, Estados Unidos ha intentado incorporar a casi todos los antiguos aliados europeos soviéticos/rusos a la OTAN, que es una alianza militar ofensiva.
“Después de que Estados Unidos y la OTAN rechazaran todas sus demandas, el gobierno ruso decidió invadir Ucrania. A partir de este momento, se están llevando a cabo importantes operaciones militares. El gobierno ruso dijo que no ocupará Ucrania pero que pretende llevar a cabo la “desmilitarización” y la “desnazificación” del país. No está claro qué significan realmente estos términos. En algunos segmentos del estado ucraniano, en particular la policía y el ejército, existe una influencia nazi considerable. En la vida política de Ucrania, el poder de los grupos fascistas ha disminuido considerablemente en los últimos años y no ejercen una influencia decisiva dentro de la administración del presidente Zelensky.
“Estados Unidos y las potencias europeas han prometido imponer un régimen de sanciones totales a Rusia, apartando al país de la economía mundial y apuntando a sus industrias más vitales. Biden anunció hoy una andanada inicial de sanciones. Estos están dirigidos a algunos de los bancos y corporaciones más grandes de Rusia y están especialmente destinados a limitar la capacidad de Rusia para acceder a los mercados de divisas extranjeras y de alta tecnología. Ya se han impuesto una serie de sanciones desde 2014, con la incorporación de Crimea a Rusia tras el golpe de estado respaldado por Estados Unidos en Kiev. Es probable que sigan más medidas. En conjunto, los eventos de los últimos dos días constituyen una ruptura profunda e histórica en el orden geopolítico existente y tendrán consecuencias en cascada en los años venideros.
“Una tragedia prevenible
“Los combates mortales que se libran actualmente en Ucrania son una tragedia. En cualquier guerra, la clase trabajadora de las naciones involucradas es la que lleva la peor parte de las dificultades y el sufrimiento. Desde 1922 hasta la disolución de la Unión Soviética, los pueblos de Ucrania y Rusia vivieron en paz. Eran socios en una economía planificada socialista y juntos derrotaron la invasión fascista nazi de 1941 a costa de 27 millones de vidas soviéticas. La contrarrevolución dirigida por la burguesía que disolvió la Unión Soviética separó a los pueblos y las repúblicas. Este ánimo y hostilidad que siguió fue el resultado predecible del fin del socialismo y el comienzo de la competencia capitalista.
“Si bien no apoyamos la invasión rusa, reservamos nuestra más enérgica condena para el gobierno de los EE.UU., que rechazó las legítimas preocupaciones de seguridad de Rusia en la región, con una intransigencia total que sabía que podría provocar tal guerra. Esta es la consecuencia de décadas de intimidación y humillación de Rusia por parte de Estados Unidos y la OTAN. El Partido por el Socialismo y la Liberación exige que el gobierno de los Estados Unidos y sus aliados en la alianza militar imperialista de la OTAN cesen de inmediato en su comportamiento provocador diseñado para escalar la crisis y proporcionen garantías de seguridad que puedan ser la base para el restablecimiento de la paz, cuya piedra angular debe ser ser una promesa para poner fin a la expansión de la OTAN. Esto es lo que puede traer alivio al pueblo de Ucrania.
“Una situación altamente explosiva se ha estado desarrollando en Europa del Este no solo en las últimas semanas y meses, sino durante muchos años. Lo que sucedió anoche y la terrible violencia que se avecinaba se pudieron prevenir, pero las decisiones tomadas por las potencias de la OTAN en cada coyuntura clave desde el final de la Guerra Fría pusieron a la región en un curso de colisión que tarde o temprano llegaría a un punto crítico.
“Desde la desintegración de la Unión Soviética y el campo socialista de Europa del Este, la alianza militar imperialista de la OTAN se ha expandido constantemente hacia el este, absorbiendo 14 antiguos estados socialistas entre 1999 y 2020. Tres de estos países — Letonia, Lituania y Estonia — eran ex repúblicas de la propia Unión Soviética. En 2008, estalló una guerra entre Rusia y Georgia, aliada de Occidente, después de que las fuerzas georgianas atacaran la región separatista prorrusa de Osetia del Sur.
“En 2014, tuvo lugar en Ucrania un golpe de estado apoyado por Occidente que reemplazó al gobierno neutral de Viktor Yanukovych por un gobierno incondicionalmente antirruso. Este golpe creó las condiciones previas esenciales para la crisis y la guerra actuales. No salió de la nada en los últimos meses. Bajo la administración de Trump, Estados Unidos se retiró del Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio y del Tratado de Cielos Abiertos, que eran piedras angulares de la arquitectura de control de armas de Europa.
“Las acciones en otras partes del mundo agravaron las tensiones. En 2011, la OTAN llevó a cabo la destrucción de Libia sobre la base de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU, que Rusia permitió aprobar basándose en falsas garantías de Occidente de que no se utilizaría para justificar una operación de cambio de régimen. Casi al mismo tiempo, estalló una guerra civil en Siria, un aliado cercano de Rusia. Rusia intervino militarmente en Siria para evitar que las fuerzas fundamentalistas reaccionarias respaldadas por Estados Unidos tomaran el control del país.
“Un punto de inflexión en la política mundial
“El discurso pronunciado anoche por Vladimir Putin anunciando la invasión dejó claro que estaba preparado para un enfrentamiento intenso y de larga duración con Occidente. Comenzando con el bombardeo de Yugoslavia por parte de la OTAN en 1999, Putin enumeró una letanía de acciones agresivas por parte de Occidente y llamó a todos los segmentos de la sociedad rusa, militares y no militares, a hacer su parte en la movilización que se avecina, que sin duda implicará un profundo impacto económico. agitación dentro de Rusia. La intención de Putin parece ser cambiar el equilibrio de fuerzas en Europa y cambiar el rumbo geopolítico con una importante intervención militar.
“La difícil situación de los rusos étnicos, especialmente los de la región de Donbas en el este de Ucrania, fue un factor importante en el discurso pronunciado por Putin, que estaba dirigido al público ruso. Putin se ha pronunciado en los últimos días sobre su oposición a la política soviética sobre las nacionalidades y considera que la creación de la Ucrania moderna ha sido un grave error por parte de Vladimir Lenin. Como señaló el PSL en nuestra declaración del 22 de febrero:
““[L]a política impulsada por Lenin fue la piedra angular para mantener las relaciones pacíficas y la unidad entre los pueblos de la Unión Soviética desde la Revolución Rusa hasta el comienzo del colapso de la URSS. Al organizar el nuevo estado socialista siguiendo las líneas del derecho a la autodeterminación, Lenin estaba asestando un golpe a lo que se denominó “gran chovinismo ruso”: la dominación del estado ruso y la nacionalidad rusa en el territorio de los justos. imperio ruso derrocado. Junto con la transferencia administrativa de territorios, esta fue una forma de asegurar que los pueblos del estado socialista recién formado pudieran vivir juntos en paz e igualdad, reemplazando la dominación brutal característica del régimen del Zar.
“No hay garantía de que el esfuerzo de Rusia por revertir la situación geopolítica a su favor tenga éxito. Hasta ahora, los acontecimientos de los últimos días han permitido al imperialismo estadounidense asegurar objetivos clave. El gasoducto crítico NordStream 2 que habría traído cantidades masivas de gas ruso al mercado europeo ya no está en marcha. Las tropas de la OTAN han estado y seguirán inundando a los miembros de Europa del Este de la alianza, incluidos los países bálticos que comparten frontera con Rusia. Justo hoy, el Pentágono anunció que enviaría 7.000 soldados adicionales a Europa. Mientras que Rusia apunta claramente a instalar un gobierno amigo en el poder en Kiev.
“El conflicto que actualmente estalla en Ucrania y se extiende por toda la región y el mundo entero es enormemente peligroso. Las acciones temerarias y provocadoras del gobierno de los Estados Unidos y sus aliados deben cesar de inmediato. La guerra económica que se está desatando contra Rusia, que afectará ante todo a la clase trabajadora del país, solo profundizará la crisis, al igual que los despliegues de tropas en cualquier lugar de Europa.
“Reconocer que Rusia tiene preocupaciones legítimas de seguridad no requiere el respaldo de todas sus acciones militares, ni la sugerencia de Putin de que Ucrania no tiene base para existir como un país independiente, ni sus estrategias geopolíticas más amplias. El papel del movimiento contra la guerra estadounidense no es seguir la línea de los países en conflicto con el imperialismo estadounidense, sino presentar un programa independiente de paz y solidaridad y antiimperialismo.
“La amenaza de guerra sólo puede ser derrotada por la solidaridad internacional entre los pueblos del mundo y una lucha resuelta contra el imperialismo estadounidense, que debe exigir la abolición de la OTAN. ¡No a la guerra contra Rusia!
NOTAS:
(1) PSL son las siglas de Partido por el Socialismo y la Liberación, una organización política de Estados Unidos de América que está compuesto por líderes y activistas, trabajadores y estudiantes, de todos los orígenes. Organizados en sedes en todo el país, su misión es vincular las luchas cotidianas de los pueblos oprimidos y explotados con la lucha por un mundo nuevo.
(2) Traducción de publicación del Partido Comunista de la Federación de Rusia
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