América Latina: la confrontación: Bolivia (III).
Sangre. Por Orestes Martí
Como dijimos ayer
en
América Latina: la confrontación:
Bolivia (II), con el
trabajo
“América Latina: la confrontación
Bolivia”, en su momento
continuamos el análisis de esa
región que habíamos iniciado con
América Latina: la confrontación.
Mientras las fuerzas
fundamentalistas de la extrema
derecha boliviana, donde hay una
fuerte presencia de carácter
fascista-religioso, tratan de
afianzar su poder fáctico a sangre,
represión y fuego, poco a poco se
van conociendo algunos detalles
sobre los acontecimientos que han
conducido al escenario actual y que
según el analista internacional
Juan Alberto Sánchez Marín
-en entrevista concedida al
destacado comunicador Jaime
Yoan Batista en
HispanTV- “ponen en juego la
supremacía de EE.UU.”
A pesar de la
triste historia de la
Organización de Estados Americanos
(OEA) en América Latina, el
Presidente boliviano confió en dicha
organización y una vez más ésta
se ha comportado como lo que
realmente es “un Ministerio de
colonias” al servicio de quien la
paga y mantiene. Las preguntas son
muchas ¿por qué ese
comportamiento?¿Por qué existiendo
otras “alternativas”, los países que
se consideran progresistas insisten
una y otra vez en tratar de
“rescatar” a la OEA
(esa
“cosa tan fea”, según
Carlos Puebla)? ¿Por qué
incluso insistieron en que
Cuba regresara “al redil” y
al final la República
Bolivariana de Venezuela
tuvo que también abandonarla?
Por otra parte y según Evo Morales:
EE.UU. nos ofreció un avión para
salir de Bolivia pero “estuve seguro
de que nos llevaría a Guantánamo”.
La represión continúa y parece que
la resistencia también, incluso que
se incrementa en la medida en que
pasan las horas.
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